Musical de humor


 El Camarín de las Musas.

 

El Camarín de las Musas. Mario Bravo 960. Jueves 6, 13, 20 y 27 de julio a las 21. Reservas: www.elcamarindelasmusas.com

 


Madre, comprame un negro

Por: Lucho Gutiérrez

Una propuesta que encierra exquisiteces y ofrece un momento de fino humor ¿qué más podemos pedir?, además de unos buenos tragos.


En los nuevos ciclos que ofrece El Camarín de las Musas, en su renovado recinto dedicado a espectáculos musicales, se presenta esta perla a la que recomiendo asistir por infinidad de razones.

Un dúo de lujo protagoniza este show, haciendo de él una excelente propuesta que muestra un abanico de canciones por demás picarescas, clásicos del cancionero iberoamericano de principios de 1900 y arreglos musicales de gran calidad.

Ella es Lucila Gandolfo, la actriz y cantante que con fortuna ha transitado los grandes y pequeños escenarios locales, recientemente en elencos como Mujeres perfectas, Dentro del bosque o Master Class junto a Norma Aleandro. En su trayectoria encontramos trabajos memorables como Madame Giry en el elenco del recordado El Fantasma de la Ópera o su rol en el musical Nine. Poseedora de una maravillosa voz con grandes dotes de interpretación, ha descubierto, en una minuciosa búsqueda y con muy buen gusto, este repertorio que posee excentricidades como las Tonadillas, género que dio origen al Cuplé. También incluye el Chotis entre los ritmos de este apasionado encuentro.

En el show hay Foxtrot, ritmo tan presente en los musicales americanos de la época, al igual que el ágil Charleston. No faltan algunos representantes de nuestros Tangos y Rancheras criollas, pero lo que enlaza este repertorio tan bien seleccionado, es el tono por demás picaresco de sus letras que lo posicionan como hot. Es una verdadera sorpresa saber que lo interpretaban respetables mujeres cancionistas de aquí y de España, como Celia Gámez, la Bella Dorita, Azucena Maizani o Mercedes Simone en sus revistas y varietés, verdaderos monólogos de humor o relatos dramáticos de profunda emoción que se estilaba en los musicales de la época.

Él es el maestro Pablo Bronzini, reconocido compositor y arreglador en el medio teatral. Ha creado las versiones musicales que él mismo interpreta en teclados, brindándole al espectáculo una compacta calidad rítmica, a la vez que sus arreglos poseen el humor que él le imprime tanto en la ejecución como en chispeantes intervenciones que posee a lo largo del espectáculo que junto a las interpretaciones actorales de Gandolfo completan una propuesta de humor que produce el placer de quien está frente a un hecho de arte.

La unión de estos dos artistas y la calidad del material, han hecho que desde hace temporadas sea un éxito en cada ciclo que generan, produciendo un boca a boca que mantiene salas llenas. Lo recomiendo y no se lo pierda, agende porque solo estarán los jueves de julio, en un sitio con excelentes tragos. 

> COMERCIAL
> DISTRIBUCIÓN
> EDICIONES ANTERIORES