Hermanas

Por: Oscar Damico

Difícil es confirmar la diversidad de formas de familia, así como los modos de amar. Aquí, un paneo sobre la complejidad de personalidades y vínculos. 

Una cocina, un muerto caliente, tres perlas de un mismo collar, una madre, el adolescente y el novio caído del cielo. Estos son los componentes que requiere esta exitosa dramaturgia de la catalana Carol López, con una lista de nominaciones y premios en la Madre Patria que ha llamado la atención de nuestra artista María Figueras.

Con escenografía de Franco Battista, vestuario de Ana Nieves Ventura y diseño de Iluminación de Matías Sendón, Figueras  hizo la puesta en escena del extravagante material. Se rodea de actrices con interesantes herramientas como Julia Catalá para el rol de Inés. Tamara Kiper encarna a Irene y Florencia Di Paolo compone a Ivonne para conformar el trío de hermanas.

José Escobar le pone el cuerpo a un inoportuno novio recién llegado con el nombre de Alex y Nicolás Romeo compone al pícaro adolecente Iván. Pero el gran hallazgo es poder ver una espléndida Elena Petraglia que compone a la madre, cada vez que su Isabel ingresa a escena un fresco aire invade la platea y es sin lugar a dudas debido al talento unido a la enorme experiencia de la valiosa actriz.

Figueras da forma a esta historia en un clima de gran desorden que le juega a favor al material, logra desestabilizar al espectador con un sinfín de situaciones que más allá del texto o lo que se dice, ocurre en paralelo con infinidad de situaciones que funcionan a favor de la historia, dando un giro constante al sistema familiar que intenta amalgamar a pesar de las imposibilidades de los integrantes, es entonces donde el humor se apodera de todo, haciendo al absurdo un proceso banal.