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Bar teatrero

El método Kairós

Por: Pedro Monti

Un clásico, dentro del circuito del laboratorio teatral de la ciudad, punto de reunión de personajes del under y encantadora vidriera para mirar y ser mirado.

Esta bendita ciudad tiene tantos recovecos y tantos lugares por donde pasarla bien, que es necesario hacer una curaduría y para eso está sobreBUE.

Sabemos que los grupos tribales se aglutinan según las propuesta de los lugares. La tribu teatrera tiene sus espacios de encuentro, esos sitios en la que se siente cómoda, zonas con una energía acorde para transformar cuatro paredes en un ámbito de culto.

Eso es lo que ocurre en el bar del Teatro El método Kairós, desde su creación, a manos de Matías Puricelli, Gastón Segalini, Santiago Meiriño, Fran Ruiz Barlett y la bella Mercedes Otero. Tuvieron la brillante idea de iniciar una pulsión que nunca ha decrecido. Mes a mes, año a año, la cartelera y el bar crecen en cantidad y en calidad, como si esa idea de nombrar al lugar con la energía del tiempo divino, hubiese marcado su destino.

Kairós es un dios mitológico y es un concepto, es la mejor calidad del tiempo. Mientras Eurípides indica que es el mejor guía en cualquier actividad humana, Hesíodo determina que es todo lo que es mejor que algo. ¡Menudo nombre! Quizás se cumpla aquello que sostenía Borges al respecto de los apellidos: decía que todos nos llamamos como de donde venimos, en referencia a su amigo Xul Solar, que según él provenía del Sol.

Aquí se cumple la teoría, que transita el mejor tiempo y que lo hacen sus dueños.

En el Budismo de Nichiren, se sostiene la teoría que cuando una persona produce un movimiento de energía positiva, se levanta en oposición un similar volumen etéreo de la energía opositora y ese es un indicio que se camina el sendero seguro. Al Kairós le tiraron una pared encima que lo aplastó, entonces me da una idea, acerca de la energía que estas personas mueven hacia la luz, nada los detiene y todo florece.

El bar está siempre poblado de gente que también está desarrollando proyectos, de arte, de producción, gente culta o con ansias de serlo, que va a estudiar allí, con alguno de los maestros que el lugar tiene, entre los cuales suenan nombres de la talla de Fran Ruiz Barlett, Marcos Rauch, Mariela Victoria Ozuna, Andrés Passeri, Matías Puricelli, Sofia Gonzalez Gil y Vanesa Butera.

Constantemente se da sala a una obra de las casi veinte que se ofrecen en las dos salas que tiene, comenzando los miércoles con Así de simple, los jueves con Barrera baja y El mundo en mis zapatos, los viernes con Qué hermosa kermesse de Ciertas Petunias, Dos, una desconexiónAl norte de providence; los sábados con La forma de las cosas, Nadie te había invitado, Amateurs, Pulmones y la séptima temporada del mítico Si Mon Dieu.

Los domingos comienzan a las 11 con Bom, Bim, Bam, inspirada en el universo beckettiano, por la tarde El bosque secreto y el misterio de los elfos, Sencillo complicado, La mishiguene de la carpa 4, Arca: simulacro patagónico y La noche que volvimos del paraíso. 

Las sonrisas y el buen trato de sus anfitriones marcan una tendencia, acorde a la calidad de las bebidas y sabores que allí sirven, dato importante para un bar, al igual que los buenos precios.

Poco más se puede decir en relación a productos, siendo que la importancia del lugar la conceden quiénes y cómo son los que lo construyen: como en todos los lugares, su gente.

El método Kairós.

El método Kairós. El Salvador 4530.