Tupé

Por: Luis Enrique Medina

Un hallazgo en materia de carnes, un encuentro con un clima familiar que alienta la carta de corte netamente porteño.

En una zona resguardada, de clima muy europeo, lindando al norte con Avenida del Libertador a una escasa cuadra, a una también de Avenida Las Heras, a una cuadra del Museo de Arte Decorativo y pegada a la esquina de la pintoresca calle de José León Pagano, se encuentra este cálido restaurante con un estilo muy particular. El local posee grandes estanterías que almacenan infinidad de etiquetas de buenos vinos, mesas que cubren algo más de 30 cubiertos, asegurando un clima íntimo para el habitué, que no se tiene que trasladar para conseguir esta necesaria característica de carta. Amplias mesas con sillas de madera negra brindan un confort estupendo al visitante. La esmerada atención de los mozos termina de redondear la elección por este sitio.

En la carta vemos una clara intención de brindar buenos productos, de la clásica comida porteña. Está compuesta por la infaltable parrilla, interesantes pastas, minutas, una buena variedad de ensaladas. En este sentido las carnes son bien surtidas, y podemos encontrar cortes como Entraña, Bife de Chorizo  o Matambre de Cerdo. Se sirve un Mix de Carne compuesto por colita, asado y vacío o el Mix de Cerdo con bondiola, solomillo y matambrito. También están presentes las Parrilladas para 2 o 4 personas, provistas con variedad de chorizo, morcilla, chinchulines, riñones, mollejas, asado, entraña, vacío, pollo y cerdo.

Para el acompañamiento de estas carnes es sugerencia probar las Papas Por H o por B fritas con queso gratinado, panceta, crema, verdeo y ají molido; Papa al Plomo Especial con panceta y parmesano o las Papas Tupe, preparadas rústicas con panceta, verdeo y pimentón. A esto hay que sumarle una interesante variedad de ensaladas, como la Urbana con rúcula, tomate, queso parmesano, tomate perita y tomates cherrys con vinagreta de oliva, miel, mostaza y aceto, La clásica mixta, La de Rúcula, queso parmesano y champiñones.

Fuera de la centralidad dela parrilla, opciones de Pastas o minutas, como Ravioles de pollo, carne y verdura; Sorrentinos de jamón y queso; Ñoquis tricolor, todo con opción de salsas simples como Fileto, crema, rosa o crema de mostaza y Salsas Especiales cómo Parisienne, Crema de puerros, Scaparo, Capresse o Bolognesa; y las minutas representadas por el Revuelto Gramajo, Milanesa a la Suiza con guarnición, Suprema a la napolitana con guarnición.

A la hora de los postres, en caso que las abundantes porciones permitan algo más, están los protagonistas como el Flan casero con dulce de leche o crema, Zapallos en almíbar, Queso y Dulce, Panqueques de dulce de leche, la Copa Tupé con helado de crema, merenguitos y dulce de leche tibio.

Todo esto puede ser muy bien regado con etiquetas con gran variedad de varietales. La propuesta general se ve muy tentadora, pero nada se compara a la hora de pagar, ahí esta otro de los principales atractivos, lo económicas que resultan las abundantes porciones hacen que además de la calidad, la ubicación y su atención, se elija tantas veces hasta ser habitué.