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Italiana

Cincinnati

Por: Álvaro Suarez Onzué

Un culto al buon mangiare, un lugar en la ciudad para tenerlo muy en cuenta a la hora de disfrutar especialidades mediterráneas.

Si bien las recetas de la gastronomía italiana poseen variaciones según la región, la condición sine qua non es que los productos que se usan deben ser frescos y de muy buena calidad. En esto, todos podemos estar de acuerdo. Después, el tema elaboración varía, según de dónde provengan nuestros abuelos.

En este templo, la calidad está a la vista, al igual que la disposición de los espacios: el los comensales en una gran nave con excelente ambientación, y el altar es donde se preparan los alimentos. Allí, como objetos de adoración, se ubican dos hornos, acompañados por los maestros pizzeros. Uno es a gas o leña, pero prefieren leña y se usa para dar terminación a los platos, el pan que se produce allí o cocciones específicas de carnes. El otro, traído desde la península itálica, es el especialista en la pizza de estilo napolitano; revestido con piedra volcánica por dentro, alcanza los 450° y 500° grados, temperaturas que inmediatamente logran la masa aireada y con anchos bordes crocantes, única en su estilo. Las variedades son de una originalidad y encuentro de sabores muy pocas veces gustadas. La Diavola con pomodoro, salame italiano, mozzarella fior di latte y pepperoncino fresco; el Quattro Formaggi con mozzarella, gorgonzola, boconccino y mascarpone o la genial Cincinnati con pomodoro, burrata, prosciutto italiano, tomate cherry y rúcula.

En lo que respecta a platos, la variedad diseñada por el cheff Atahual Flores es tan extensa que me limitaré a recomendar mis preferidos, pero al leer la carta reconocerá el suyo. Un alimento, traído del cielo, es la inmejorable burrata, que para quienes buscan la perfección, pueden acompañarla con un jamón serrano de extrema calidad.

Las empanadas al horno son muy recomendables.

En pastas, las rellenas son producidas allí mismo, los Sorrentinos de osobuco braseado y manteca de tomillo y de este estilo, son de otro planeta.

En pastas secas, trabajan las de marca italiana Barilla. Las salsas de tomate son marca Divella y permiten saborear los mejores Rigatoni con pomodoro, berenjenas, zucchini, mascarpone y panceta o los Spaghetti Vongole, con almejas, berberecho, ajo y perejil. El Risotto Gorgonzola hecho con arroz carnaroli Divella (italiano) mas gorgonzola, nueces y radicchi elevan el espíritu. Otro preferido es el Pulpo a la leña, con cremoso de hinojo y gremolata. Hay un especial Bife Chorizo Angus de 400 gramos con gremolata  que es la gloria. Y para degustar algo de mar aconsejo la Pesca del día a la leña con caponata.

Deje un espacio para el Tiramisú o la Panna Cotta, Sin olvidar la Nutella Pizza, con nueces, avellanas y menta.

Este fantástico lugar, ubicado en la Torre Bellini Esmeralda, propone un ambiente ideal para almuerzos laborales, cenas familiares o con amigos.

Un Happy Hour de cerveza tirada y una carta de cocktails realizada por el reconocido bartender Federico Cuco. Puede tomarlos en el sector al aire libre integrado al ingreso mientras espera al resto de los comensales.

Durante el mediodía, Cincinnati propone almuerzos ejecutivos a un precio muy bajo, el menú es rotativo y consiste en una entrada, pizza o pasta como principal, café y postre degustación.

Nada caerá pesado, ya que tienen aguas de Aqua Panna o San Pellegrino y café de Lavazza para la sobremesa. Todo nos hace sentir en la Bella Italia.

Cincinatti.

Esmeralda 924. Lunes a jueves de 11 a 00. Viernes y sábado de 11 a 01. Domingo cerrado. Happy Hour de cerveza todos los días de 17 a 20.