RECOMENDADOR DE ARTES Y ESPECTÁCULOS

Danza

Registro (o ensayos sobre como aniquilar un proceso)

Por: Gustavo Friedenberg

Una pieza magnífica que vuelve a poner en valor la potencia del movimiento.

Desde hace tiempo que el Centro Cultural Rojas destaca por brindar a la danza  un lugar de privilegio, garantizando una oferta atractiva y original que, además, está a cargo de creadores Sub-30.

En esta ocasión, el rosarino Julián Toledo presenta la segunda temporada de su personal Registro. Con excelentes interpretaciones de Micaela Almirón, Braian Bre, Federico Cáceres, Agustina Miranda y Elizabeth Moglia, que pese a su juventud, dan cuenta de una inusual madurez escénica, además de un virtuosísimo técnico que sorprende, seduce e hipnotiza.

El trabajo de Toledo se distingue en su apuesta por lo coreográfico, a través de la insistencia sobre partículas de movimiento, en general muy simples, que podrían provenir del teatro de revista, o bien de la cumbia, la murga o el reggaeton, pero que en la repetición construyen algo nuevo, obligando al espectador a repensar aquello que se actualiza permanentemente delante de sus ojos.

Con una excelente puesta de luces y un vestuario perfectamente integrado, la obra se apoya tanto en un pegadizo motivo musical, que termina calando en los huesos de todos -dentro y fuera del espacio escénico- como en la democrática sensualidad de los cuerpos, que no detentan una particular distinción entre femenino y masculino, volviendo el movimiento y la extenuación el centro de la cuestión.

Si es cierto que sobre la mitad, el trabajo presenta un quiebre dramatúrgico inesperado y peligroso, incorporando nuevos recursos narrativos, también hay que admitir que el joven coreógrafo lo resuelve con determinación, convirtiendo el trabajo en una propuesta tan sugerente como valiosa, que ofrece múltiples capas de lectura y no le teme a los riesgos.

C.C.Rojas

Sala Cancha / Av. Corrientes 2038

Jueves 21hs